Javier Prieto de María
Más de la mitad de la población sufren molestias en los pies que limitan, en diverso grado, sus actividades diarias y deportivas, pero menos de la mitad consultan con su médico de familia. El dolor en el pie es el segundo motivo de consulta en atención primaria por problemas del aparato loco- motor.
El pie es muy accesible a la exploración clínica. Hay que conocer su anatomía y comprender su funcionalidad para poder establecer muchos diagnósticos.
La mayoría de los pacientes con problemas en los pies refieren dolor. El dolor crónico es el más común y se define por una duración mayor a dos semanas.
El dolor agudo se debe a lesiones traumáticas como las fracturas, esguinces o las contusiones.
En el pie asientan con frecuencia manifestaciones de una enfermedad sistémica, como los reumatismos inflamatorios, e incluso alguna enfermedad metabólica, como los xantomas tendinosos por hipercolesterolemia. La distrofia simpaticorrefleja o algodistrofia es bastante frecuente en el pie, conociéndosela como distrofia de Sudeck (consultar artículo Síndrome de Sudeck)
Etiología
La clasificación de las algias del pie no es sencilla, por la multitud de procesos que pueden producirlas (locales y sistémicos), por su anatomía (formada por 28 huesos y 57 articulaciones) y por la implicación biomecánica.
Clásicamente se ha clasificado en talalgias y metatarsalgias. Si entendemos por talalgia el dolor que aparece en el talón y metatar- salgias el que se presenta en la región metatarsal, muchos cuadros dolorosos no tendrán cabida en esta simplista clasificación.
Considero más adecuado clasificarlos en dolores del retropié, que engloba las talalgias, la sintomatología ocasionada por los tendones que cruzan el tobillo, como el Aquiles, tibiales, peroneos, flexores y extensores de los dedos, y la patología articular del retropié, como la compresión de la cola del astrágalo; dolores del mediopié, que incluye los procesos patológicos de los huesos del tarso (excepto el astrágalo y el calcáneo), las articulaciones de Chopart y Lisfranc y los tendones que se insertan en ellos (entesitis de los tibiales y de los peroneos); y dolores del antepié, que incluye a las metatarsalgias y a los dolores de los dedos de los pies.
Protocolo Acupuntural
La Posición del paciente
Paciente en decúbito ventral, rodilla semi-flexionada con un cojín bajo el tobillo
Los puntos
1Rn Yongquan, PC154 lineiting y punto "empírico"
La Técnica de puntura
Presión fuerte del pulgar izquierdo sobre los puntos de acupuntura,
Inserción rápida de las agujas con la mano derecha, de 0,3 a 0,5 cun de profundidad,
Obtención del deqi,
Manipulación de la aguja, según la técnica de mitad tonificación, mitad dispersión,
Moxibustión sobre la aguja, 2 moxas sobre la aguja y se retiran
Sesiones
Tres sesiones por semana, durante 4 a 6 semanas
Comentario
Xi Hai-Hong indica que estas algias corresponden a un síndrome de Bi Viento-Frío-Humedad responsable de un estancamiento de Qi y de Xue al nivel plantar. Utiliza el método de la aguja caliente wenzhen, asociando la acupuntura y la moxibustión, descrita en el Shang Han Lun, que permite de calentar los jingluo, activar el Qi y la sangre-Xue y por lo tanto, tratar las enfermedades debidas al frío bloqueado en los jingluo. Utiliza dos puntos locales clásicos en esta indicación (1Rn y Lineiting) y un punto local de experiencia clínica. La fuerte presión pre-puntura de los puntos permite disminuir el dolor de la punción.
Autocuidados de los pies
Higiene correcta (sea más minucioso si es diabético o tiene problemas circulatorios)
– Lávese los pies diariamente con jabón poco agresivo. Séquelos muy bien, sobre todo entre los dedos.
– Si tiene la piel seca utilice una crema hidratante. – Cámbiese los calcetines diariamente. Use prendas de algodón. – Córtese las uñas correctamente (rectas). – Cure bien siempre las heridas aunque sean pequeñas. – Consulte a su médico de familia cuando aparezcan callosidades o durezas.
Ejercicio físico
– Si usa zapatos durante muchas horas seguidas, conviene que realice, de forma reiterada, pequeños movimientos de los dedos.
– Descálcese si puede y realice ejercicios con los dedos de los pies.
– Camine descalzo por la arena, por el césped o por una alfombra siempre que pueda.
– Si hace deporte, utilice el calzado adecuado para ello.
Calzado
– Lo ideal es que use zapatos de tacón ancho, que no sobrepasen los 4 cm de altura y que sean de material transpirable o de piel.
– El talón debe tener contrafuertes laterales y la puntera debe ser ancha para poder mover los dedos.
– La suela debe ser flexible.
– La medida debe ser la correcta (ni demasiado holgado ni prieto).
Consulte a su médico cuando tenga deformidades o dolor de pies
Bibliografía:
- Revue Acupuncture&Moxibustion, 2004, 3. Pratiques rhumatologiques, por Olivier Goret. Traitement des algies plantaires par points locaux
- Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia. Sección 22, capítulo 235 Algias del pie :F. Santonja, J. Maroyo, J.M. Vergeles, A. Bonaplata, C. Salcedo